martes, septiembre 19, 2006

Reflexion

Que duro es ver la muerte de tan cerca, que duros suenan los lamentos cuando les tienes a flor de piel, que peso tienen las lágrimas cuando puedes secarlas con tus propias manos, que duro se hace que se ahoguen las palabras de consuelo sin saber que decir y perderse en un laberinto sin saber por donde salir, que dificil es saber como comportarse en una situacion tan dura como la perdida de un ser querido, que duros son los recuerdos y las sonrisas de las bocanadas de aire y risas y abrazos y besos que sabes que ya no vuelven, y es que vivimos la vida pensando que la muerte es un agente que nunca podra con nosotros, que es algo que nos pilla lejano, creemos que el cancer de fumar es simplemente una forma de meternos miedo por un comportamiento socialmente inapdatado cada vez mas en nuestros dias, si mueren pokitos de cada tanda.... como nos va a tocar... amos venga, igual que matarte en un accidente de trafico...pero que dices como me la via dar si schumaker es un newbie a mi lado....
Pues si amigos toca, y una vez mas ha sido un cancer quien se ha llevado a una de las personas que mas queria, sin quererlo, al estar con la realidad frente a frente me he dado cuenta de lo que me ha marcado dicha persona sin querer y se han caido las lagrimas que no pude retener dentro de mi, aun queriendo ser fuerte pues preferia tener una mirada fria y consoladora para la familia que dejarme llevar por el torrente de lagrimas que al final hicieron que dos de las valientes de las que guardaba se escaparan...
Y porque nos damos cuenta de lo que queremos cuando se escapa, puta naturaleza del ser humano, ayer cumpli en mi lamento pero no me llego, hoy me he visto sobrepasado por una situacion que no sabia controlar, ni que hacer...
Y dicen que las palabras es algo que se queda en el olvido, que tarde es para decir ciertas cosas, no creo en la otra vida de momento, supongo que a mal menor sera mi arrepentimiento cuando vea la muerte cerca, pero me despido de ti con la sonrisa mas grande que pueda poner sabiendo que has sido un hombre justo y bueno, que has cuidado siempre de los que mas querias y hoy mas que nunca es cuando ha quedado patente, que te ha llevado una enfermedad que te llevaba tiempo buscando las weltas y se que has resistido todo lo que te ha sido posible, y es una pena no volver con mis 8 años a salamanca jugando contigo sin complicaciones viendo reirte junto a tu hermano, mi padre cuando parecian que las noches alli se hacian eternas para bien y que con la sonrisa en la boca me quedaba placidamente dormido en el coche en el viaje de vuelta, y si no dormia miraba las estrellas para distraerme y abrazar la almohada con una fuerza inusitada.
Gracias por cada momento, no creo que jamas puedas saber de la existencia de estas palabras, pero necesitaba escribirlas para dedicarte el trozo de mi corazon del que formas parte.
Un abrazo muy fuerte, tio Carmelo